- Entender la diferencia de limpiar y desinfectar: es muy común que en pequeños negocios se siga el patrón de limpieza aprendido en casa, el cual enseñó solo a limpiar, eliminando la suciedad visible y aromatizando ambientes. El desinfectar es un proceso posterior a la limpieza en el cual se elimina bacterias, virus y hongos imperceptibles a la vista.
- Elaborar un programa de higiene: armar un programa de limpieza y desinfección según el tipo de negocio, detallando y agrupando todos los artículos y superficies a limpiar de acuerdo al tipo de limpieza que requiera cada uno. Se debe establecer los horarios, la frecuencia, los productos a usar, su dosificación y forma de uso sugerida por el fabricante.
- Uso adecuado del producto de limpieza y desinfección certificados: el uso inadecuado de un producto desinfectante genera un alto riesgo en el pequeño negocio. Es importante leer bien las etiquetas, seguir las instrucciones del fabricante y comprando solo a empresas formales y especializadas en el tema, y muestren el registro sanitario vigente y certificaciones que avalen lo ofrecido por sus productos.
- Utilizar productos especializados no domésticos: Artículos de limpieza y desinfectantes que garanticen la eliminación de todo tipo de virus, bacterias y hongos, y por el otro, generen un gran rendimiento dada su alta concentración.